Rosa Mosqueta, el Aceite de la Juventud
El aceite de Rosa Mosqueta es conocido como el “Aceite de la Juventud”, utilizado desde hace más de 2.000 años por diferentes civilizaciones. Éstas buscaban las acciones medicinales y cosméticas de la rosa mosqueta para hidratar, curar heridas y tratar diversas alteraciones de la piel.
Es un “aceite seco” de textura ligera y fluida. Es rico en ácidos grasos esenciales polinsaturados: linoleico, linolénico, oleico, etc., así como en taninos, carotenos, flavonoides y otros potentes antioxidantes. Su equilibrada composición de ácidos grasos hace que se absorba rápida y fácilmente a través de la piel sin dejar residuo graso.
Debido a esta capacidad de absorción, el aceite de rosa mosqueta actúa en las capas profundas de la piel, lo que contribuye a favorecer su firmeza y elasticidad.
Usos del Aceite de Rosa Mosqueta
EN LA PIEL: Ayuda a restaurar la hidratación, elasticidad, color y tono natural de la piel, teniendo propiedades astringentes, antiinflamatorias y antioxidantes. Es adecuado para todo tipo de piel, especialmente piel seca, madura y sensible. Es de uso facial y corporal.
EN EL PELO: Los ácidos grasos del Aceite de Rosa Mosqueta reducen la sequedad del cuero cabelludo, sin dejar residuo graso, devolviendo el brillo, la sedosidad y el volumen al cabello.
EN LAS UÑAS: El aceite de Rosa Mosqueta ayuda a hidratar y fortalecer las uñas actuando contra la sequedad y fragilidad.
Es un “aceite seco” de textura ligera y fluida. Es rico en ácidos grasos esenciales polinsaturados: linoleico, linolénico, oleico, etc., así como en taninos, carotenos, flavonoides y otros potentes antioxidantes. Su equilibrada composición de ácidos grasos hace que se absorba rápida y fácilmente a través de la piel sin dejar residuo graso.
Debido a esta capacidad de absorción, el aceite de rosa mosqueta actúa en las capas profundas de la piel, lo que contribuye a favorecer su firmeza y elasticidad.
Usos del Aceite de Rosa Mosqueta
EN LA PIEL: Ayuda a restaurar la hidratación, elasticidad, color y tono natural de la piel, teniendo propiedades astringentes, antiinflamatorias y antioxidantes. Es adecuado para todo tipo de piel, especialmente piel seca, madura y sensible. Es de uso facial y corporal.
EN EL PELO: Los ácidos grasos del Aceite de Rosa Mosqueta reducen la sequedad del cuero cabelludo, sin dejar residuo graso, devolviendo el brillo, la sedosidad y el volumen al cabello.
EN LAS UÑAS: El aceite de Rosa Mosqueta ayuda a hidratar y fortalecer las uñas actuando contra la sequedad y fragilidad.
Fuente MARNYS® Magazine
